La mejor estrategia para luchar contra el
frío en actividades al aire libre como el ciclismo, es usando el sistema de
capas. Sacar el mejor partido a las prendas de abrigo consiste en
usar las capas de manera que a cada tipo de prenda se le dé el mejor uso posible para la posición en la que está.
La primera capa sería
la que va a estar en contacto con nuestra piel, la 'camiseta interior', lo
ideal es que nos quede ajustada, sea muy transpirable, que evacue rápidamente todo el calor y sudor
que generamos, evitando esa sensación de 'sudor frío' que muchas veces se tiene
después de un intenso esfuerzo (que no sean de algodón 100%, pues dan este tipo de problemas).
La segunda capa, el maillot convencional. Suele ser una
prenda no muy gruesa que debería facilitar el mantener la temperatura de tu
cuerpo, favoreciendo igualmente la transpiración. Si hace mucho frío lo mejor
es llevar otra camiseta interior (el maillot pasa a ser la tercera capa).
La tercera capa se usaría en días de intenso frío. Son prendas
de manga larga, más gruesas, cortavientos, que dificultan la entrada de
aire y por lo tanto, también la pérdida de calor. Ante un ejercicio
prolongado pueden 'agobiarte', por lo que lo ideal es que también sea transpirable.
El impermeable, muy fino , puede ser la cuarta capa tanto con lluvia como
sin ella, debido a que protege del viento. Es importante que lo puedas guardar en
los bolsillos del maillot, para utilizarlo según nos convenga.
La mejor estrategia para luchar contra el
frío en actividades al aire libre como el ciclismo, es usando el sistema de
capas. Sacar el mejor partido a las prendas de abrigo consiste en
usar las capas de manera que a cada tipo de prenda se le dé el mejor uso posible para la posición en la que está.
La primera capa sería
la que va a estar en contacto con nuestra piel, la 'camiseta interior', lo
ideal es que nos quede ajustada, sea muy transpirable, que evacue rápidamente todo el calor y sudor
que generamos, evitando esa sensación de 'sudor frío' que muchas veces se tiene
después de un intenso esfuerzo (que no sean de algodón 100%, pues dan este tipo de problemas).
La segunda capa, el maillot convencional. Suele ser una prenda no muy gruesa que debería facilitar el mantener la temperatura de tu cuerpo, favoreciendo igualmente la transpiración. Si hace mucho frío lo mejor es llevar otra camiseta interior (el maillot pasa a ser la tercera capa).
La tercera capa se usaría en días de intenso frío. Son prendas de manga larga, más gruesas, cortavientos, que dificultan la entrada de aire y por lo tanto, también la pérdida de calor. Ante un ejercicio prolongado pueden 'agobiarte', por lo que lo ideal es que también sea transpirable.
El impermeable, muy fino , puede ser la cuarta capa tanto con lluvia como sin ella, debido a que protege del viento. Es importante que lo puedas guardar en los bolsillos del maillot, para utilizarlo según nos convenga.
La segunda capa, el maillot convencional. Suele ser una prenda no muy gruesa que debería facilitar el mantener la temperatura de tu cuerpo, favoreciendo igualmente la transpiración. Si hace mucho frío lo mejor es llevar otra camiseta interior (el maillot pasa a ser la tercera capa).
La tercera capa se usaría en días de intenso frío. Son prendas de manga larga, más gruesas, cortavientos, que dificultan la entrada de aire y por lo tanto, también la pérdida de calor. Ante un ejercicio prolongado pueden 'agobiarte', por lo que lo ideal es que también sea transpirable.
El impermeable, muy fino , puede ser la cuarta capa tanto con lluvia como sin ella, debido a que protege del viento. Es importante que lo puedas guardar en los bolsillos del maillot, para utilizarlo según nos convenga.
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